Como todos fuimos testigos, el Rally de Cerdeña fue ganada por Jari-Matti Latvala y el recién pasado Acrópolis, por Mikko Hirvonen y el que supuestamente iba a obtener la victoria en todas las fechas de este año, Sebastien Loeb, no ha tenido buenos resultados.
Hace tiempo que estábamos acostumbrados que el francés, que lo ha ganado todo y no ha dejado nada a nadie, se llevara el primer lugar en todo, pero en los dos pasados rallyes hemos visto como al imbatible Loeb, la suerte se le ha ido por el suelo.
Quien supuestamente es el mejor de todos los tiempos, ha cometido errores que lo han llevado a perder mucho terreno que había acumulado hasta ahora.
Como nos podemos dar cuenta, el extraterrestre, de apoco se ha vuelto un humano común y corriente, el cual se equivoca y, como todo hombre, pierde.
Esto abre la puerta a que el resto, que es humano, pueda obtener buenos resultados y se destaque por sus logros antes por ocupar una plaza por dinero. Además favorece el espectáculo.
El hecho de que un solo hombre ganara todo, hacia que cada fecha del Mundial de Rally, no tuviera la emoción de antaño. En la época en que estaban Carlos Sainz, Colin Mcrae, Tommi Makinen, Marcus Gronholm, Markko Martin, Richad Burns y varios más, todas la pruebas de rally, eran un alto y bajo de emociones, ya que nunca se sabia realmente quien iba a ganar, pero con la llegada de Loeb, parte de eso se perdió, dejando la atención en él.
Con el hecho de que, ahora, el supuesto gran piloto, el mejor de todos los tiempos, se equivoque y abandone, hace que regrese parte de la emoción, que él mismo se encargo de arrebatar.
No es que me guste que Sebastien Loeb se equivoque o abandone en todas las fechas, pero el hecho de que gane todo, hace que surjan campeonatos paralelos como el IRC y la atención e interés de las marcas y auspiciadores se vaya a otros lados (aunque mucha de la responsabilidad, sino toda, es parte del propio patrocinador del WRC, la ISC) y que la cantidad de pilotos candidatos a la victoria, disminuyan constantemente, pero su error, da mayor atención a un campeonato que se ha ido a baja.
Sebastien Loeb, es, para la alegría de muchos y el descontento de varios, el mejor de todos los tiempos, por lo menos así lo dicen los números, pero sus problemas ahora último hacen que quizá se le haya ido la magia, pero es algo que se agradece, ya que da mas sazón a una cazuela que se le había ido un poco el sabor.
Espero que esta humilde opinión le haya gustado, por lo demás, muchas gracias a todos, me despido, xau.
JoPeK
Hace tiempo que estábamos acostumbrados que el francés, que lo ha ganado todo y no ha dejado nada a nadie, se llevara el primer lugar en todo, pero en los dos pasados rallyes hemos visto como al imbatible Loeb, la suerte se le ha ido por el suelo.
Quien supuestamente es el mejor de todos los tiempos, ha cometido errores que lo han llevado a perder mucho terreno que había acumulado hasta ahora.
Como nos podemos dar cuenta, el extraterrestre, de apoco se ha vuelto un humano común y corriente, el cual se equivoca y, como todo hombre, pierde.
Esto abre la puerta a que el resto, que es humano, pueda obtener buenos resultados y se destaque por sus logros antes por ocupar una plaza por dinero. Además favorece el espectáculo.
El hecho de que un solo hombre ganara todo, hacia que cada fecha del Mundial de Rally, no tuviera la emoción de antaño. En la época en que estaban Carlos Sainz, Colin Mcrae, Tommi Makinen, Marcus Gronholm, Markko Martin, Richad Burns y varios más, todas la pruebas de rally, eran un alto y bajo de emociones, ya que nunca se sabia realmente quien iba a ganar, pero con la llegada de Loeb, parte de eso se perdió, dejando la atención en él.
Con el hecho de que, ahora, el supuesto gran piloto, el mejor de todos los tiempos, se equivoque y abandone, hace que regrese parte de la emoción, que él mismo se encargo de arrebatar.
No es que me guste que Sebastien Loeb se equivoque o abandone en todas las fechas, pero el hecho de que gane todo, hace que surjan campeonatos paralelos como el IRC y la atención e interés de las marcas y auspiciadores se vaya a otros lados (aunque mucha de la responsabilidad, sino toda, es parte del propio patrocinador del WRC, la ISC) y que la cantidad de pilotos candidatos a la victoria, disminuyan constantemente, pero su error, da mayor atención a un campeonato que se ha ido a baja.
Sebastien Loeb, es, para la alegría de muchos y el descontento de varios, el mejor de todos los tiempos, por lo menos así lo dicen los números, pero sus problemas ahora último hacen que quizá se le haya ido la magia, pero es algo que se agradece, ya que da mas sazón a una cazuela que se le había ido un poco el sabor.
Espero que esta humilde opinión le haya gustado, por lo demás, muchas gracias a todos, me despido, xau.
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